No te lo puedo decir.
Las palabras se me esconden entre los dientes.
No se quieren pronunciar. Y las pestañas se me caen cuando te cruzan.
Me diste los besos más lindos del mundo.
El problema es tu boca. Tu boca tiene la culpa de todo. De todo esto que no es nada.
Tu boca que no hace otra cosa que llamar a mis ojos.
Mis ojos que no saben decirle que no.
Los besos más lindos del mundo. Vos el más lindo del mundo.
Y tus ojos que son ojos de haber visto mucho.
Y yo que no lo encuentro.
Yo que soy de poca reflexión.
A mí que me gusta golpearme contra la pared y hasta caigo con estilo.
Lo busco y no lo encuentro, ¿cómo puede ser?
Cómo puede ser que tengas esa boca. Que me des esos besos.
Que tengas esos ojos. Que me mires así.
Que te vayas a tu vida y yo haga dormir a la mía que no para de llorarme.
Llora y no sabés cómo. No te importa cómo.
Me reclama, mi vida, me pasa factura todos los días.
Me dice que no te bese. Me dice que no me mires.
Pero es que yo no lo encuentro.
Hace rato lo vengo buscando, y no encuentro, un punto final
6 comentarios:
Ya lo había leído en tu blog Mili, pero me sorprende porque en esta leída se me hizo mucho más gráfico y concreto; siento que entiendo perfectamente a qué te referís, llamás a mis propios recuerdos.
WS.-
Me encanto!!! Me hacés suspirar Mili!!! Porqué decís lo que no quiero saber? eh?
Garcias por tus palabras como siempre. Y gracias al Profe.
Gracias chicas!
Y gracias Domingo, si, por compartirlo.
Milagros.
Amé este escrito cuando lo leí, comparto cada línea, justo en ese momento buscaba un punto final...
No me canso de leerte Mili, y siempre te digo que no dejes de escribir, vamos por más!!!
Marucha!
Mili, no te sabía escritora!!!
Me encantó lo que escribiste!!! Me reconozco a mí misma, allá hace tiempo, diciendome tus palabras...
Siga así, m'hijita que quiero seguir leyéndola!!! Besotes! Petu.
lindo y efectivo
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